Existen varios sitios para acampar cerca de Bogotá, la topografía del departamento de Cundinamarca permite la existencia de paisajes a diferentes altitudes con su flora y fauna características.
En la región abundan los valles rocosos, los páramos y los bosques andinos de niebla. Estos son los escenarios ideales para conectarse con la naturaleza y dejar de lado las preocupaciones de la ciudad. Su proximidad con la capital los convierte en planes perfectos para un fin de semana.
En todas las direcciones a las que mires, puedes encontrar parajes con condiciones increíbles para montar tu tienda y prender tu fogata con responsabilidad. Aquí te mostramos solo cinco ubicaciones en las que podrás pasar un agradable fin de semana.
El Chingaza se encuentra a solo tres horas de Bogotá. Este territorio es reconocido por albergar una reserva de agua que abastece el 75 % de la demanda acuífera de la ciudad de Bogotá. Esta reserva natural se encuentra entre los departamentos de Cundinamarca y Meta, y se sitúa en la cordillera oriental. La actividad de camping se puede complementar con el avistamiento de aves (hay más de 530 especies), osos de anteojos, venados de cola blanca, coatíes, entre otros especímenes de la fauna endémica.
Se pueden recorrer 5 senderos autorizados. Una de las experiencias más fascinantes es conocer las lagunas de Siecha y el embalse de Chuza, este embalse es la principal reserva de agua para Bogotá. Para ir se debe reservar con dos semanas de anterioridad, en el lugar hay cabañas que se pueden reservar aparte de las zonas de camping.
Este lugar se encuentra ubicado en el municipio San Antonio de Tequendama, está a solo 30 minutos de la ciudad de Bogotá, y allí puedes vivir una experiencia de acampada única. Solo imagínate despertar, abrir la carpa y encontrarte con un manto de niebla que cubre los arboles y a tu alrededor el aleteo de los colibrís. Este hermoso bosque de niebla alberga una flora exquisita compuesta de orquídeas, enormes robles, líquenes y musgo.
Uno de los senderos que más destaca en el lugar es el Pico de Águila. Recorriéndolo, te podrás encontrar con estas aves de rapiña en medio de un bosque de robles de hojas que pintan el sendero de naranja al caer. Abundan las aves y los mamíferos pequeños y puedes llegar a una cascada de 70 metros. Se llega tomando la autopista sur y en Soacha se hace un desvío hacia el sector de El Altico, por esta vía se recorren 7 km y se llega a la entrada del parque.
Ubicada en el municipio de Choachí, Cundinamarca, la Chorrera es la cascada más alta de Colombia y la sexta más alta de Sudamérica. Tiene 590 metros de altura y la puedes descubrir a no más de 50 minutos de la ciudad de Bogotá. Para llegar hasta allí, debes dirigirte hacia el municipio de Choachí y llegar hasta el sendero que conduce hacia las taquillas del parque.
A partir de allí, te puedes adentrar en la reserva y encontrar el lugar para armar tu carpa. Desde las taquillas del parque, hasta la cascada más alta de Colombia se debe hacer una caminata de 3 horas, en el camino puedes avistar aves y apreciar otra cascada, El Chiflón, de 55 metros de altura, además de hacer espeleología en la cueva Los Monos. También puedes hacer rápel, torrentismo, canopy y cabalgar.
Ubicado entre los municipios cundinamarqueses de Cogua y Tausa, este parque tiene 3.700 hectáreas de bosque andino y un embalse de 800 hectáreas. Allí se puede realizar pesca deportiva y acampar a orillas del lago. Se encuentra a 65 kilómetros de la capital y presenta un paisaje verdeazulado en el que predominan el olor de los pinos y el canto de los pájaros. En el embalse se pueden encontrar truchas arcoíris, guapuchas y capitanes de la sabana.
En el lugar se pueden alquilar cabañas, bicicletas MTB y lanchas. Para llegar en carro deberás salir de Bogotá por la autopista Norte y luego dirigirte por la vía Ubaté, donde podrás ver la señalización hacia el Neusa.
Este destino está a una hora de distancia o 60 km. Este lugar fue el hogar de la cultura muisca hace cientos de años. Allí se puede practicar la escalada en roca, ciclo montañismo, espeleología y acampada. Por el lugar pasa una vieja carrilera al borde de la cual se puede acampar y caminar en la noche.
Se llega tomando la autonorte hacia Tunja. Después de pasar el segundo peaje verás un letrero que te indicará como cambiar de vía y dirigirte directamente hacia Suesca.
Acampar cerca de Bogotá es la oportunidad perfecta para reencontrarte con tu yo natural. Por suerte a pocas horas se encuentran los más hermosos sitios para realizar esta actividad a los que podrás llegar en tu carro.
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